El ascensor de Ametzola es una instalación de transporte vertical construida en el límite entre los barrios de Irala y Ametzola, entre las calles Ugalde y Batalla de Padura. En otoño de 2006 Bilbao Ría 2000 propone a la ingeniería Esteyco, en colaboración con Gloria Iriarte (IMB Arquitectos), el estudio de una solución para la creación de una conexión peatonal entre las calles que confluyen sobre la ladera de Irala y la recién urbanizada avenida del Ferrocarril, en una trama urbana interrumpida por fuertes desniveles.
El proyecto, redactado por los ingenieros Javier Rui-Wamba y Carlos García Acón y el arquitecto Andreu Estany, resuelve, en lo que era una zona urbana residual, la conexión entre dos zonas mediante la construcción de un núcleo de comunicación vertical compuesto por dos ascensores y una pasarela peatonal de tres metros de anchura. La torre baja, de 14 m. de altura, incorpora el ascensor de conexión entre la calle Padura y el aparcamiento. La más alta, de 22 m., sobresale como elemento singular de relación entre la parte alta de Irala y el área de Ametzola.
Las dos torres, la pasarela y el edículo de salida del aparcamiento forman un elemento unitario construido con hormigón y vidrio de color. Las torres se conforman como dos láminas de hormigón plegadas de 3 m. de anchura y 50 cm. de espesor, que albergan las estructuras metálicas soporte de los ascensores. Las dos caras abiertas se cierran con láminas de vidrio laminado de color verde, un tono claro para la torre alta y un verde más brillante para la torre del aparcamiento y el edículo de salida. La iluminación nocturna alojada en el interior resalta la geometría de las láminas de hormigón y refleja al exterior un halo verde visible y reconocible desde el entorno inmediato de la ciudad. Inaugurado en 2008, desde Ametzola se convierte en un gran faro al final de la avenida; desde Miribilla, el primer elemento urbano del renovado barrio.
Francisco J. García de la Torre y Bernardo I. García de la Torre