El conocido como edificio de Guardias Forales está ubicado entre las calles Iparraguirre y Gordóniz entre medianeras y destinado a uso de viviendas, habiendo sido proyectado por el arquitecto Diego Basterra en 1933.

Tiene ocho plantas, con un zócalo de planta baja y primera, predominando en su trazado la sencillez compositiva y funcional con cuidados detalles en las fachadas. Destaca la modulación de los huecos con una original solución de los antepechos y las jambas, paños limpios en las alineaciones y voladizos, y remates superiores con la prolongación de dos cuerpos verticales laterales.

En estas viviendas económicas o casas baratas, que en algunos otros casos estaban inspiradas en la arquitectura de tendencia regionalista neovasca, la funcionalidad y las ajustadas superficies marcan las directrices compositivas por encima de cualquier otra consideración.

Las denominadas “casas baratas” tuvieron gran auge durante los años treinta del siglo XX. El Ayuntamiento de Bilbao convocó un concurso para el grupo de Solokoetxe ganado por el arquitecto Calixto Emiliano Amann, que marcó un hito de referencia para toda una época. En este proyecto puede percibirse también esa influencia.

Diego Basterra proyectó edificios de viviendas sociales posteriormente adaptados para cuarteles de forales, desde su cargo como arquitecto de la Diputación.