Eusebio Erkiaga nació en Lekeitio (Bizkaia) en 1912. Fue un hombre de letras en lengua vasca cuya bibliografía resulta importante en cuatro momentos distintos: antes de la Guerra Civil, en plena dictadura, en los años 1960-1970, y tras la llegada de la democracia.
Realizó estudios de Peritos en Bilbao. En la primera posguerra ofreció clases de lengua vasca hasta que más tarde se ocupó en la banca, componiendo uno de los proyectos culturales del Banco de Vizcaya, una revista que dirigía y redactaba con una amplia presencia en la emigración vasca en América.
En la época de la II República poemas en las revistas Euzkerea y Yakintza, textos que se inscribían en la corriente modernista del momento. Sus obras aparecen entre 1934 y 1936 y en ese año, al celebrarse en Lekeitio el VII Olerki Eguna recibe la Mención de Honor por el poema “Lore Gorriak”. Además perteneció a la redacción del primer diario en lengua vasca Eguna, que se publicó desde 1936 hasta la caída de Bilbao.
Fue nombrado correspondiente de la Real Academia de la Lengua Vasca en 1952 y Miembro en 1963. Aún bajo la dictadura de Franco dirige, escribe y publica la revista Bizkaiko Bankuko Boletina, una revista publicada en su totalidad en lengua vasca de la que era redactor y editor. Se publicó entre los años 1964 y 1970 y se distribuyó en el extranjero, sirviendo de nexo de unión entre los expatriados y la pujante Villa bilbaína.
Su importancia deviene de su destacada obra novelística. Arranegi (1958) dio comienzo a una fructífera obra narrativa. Si esa primera novela cultiva el costumbrismo que proviene de la influencia de Domingo de Agirre, las notas de la novela lírica se dejan sentir en la importancia concedida a la descripción. En esa novela el autor centra su atención en la localidad que le vio nacer. Pronto dirigirá su mirada hacia la novela histórica, Araibar zalduna (1962) y Batetik bestera (1962), obras que se presentaron a los Concursos de novela organizados por Euskaltzaindia y que ganó la primera de ellas.
Tras años de silencio Eusebio Erkiaga publicó nuevas novelas como Jaioko dira (1984), una novela situada en la Guerra Civil, Txurio Txuria (1986), Irribarrea galtzen denean (1987) dando lugar a una nueva época en su novelística.
Este renacimiento coincide con la importancia de los premios institucionales que recibe Eusebio Erkiaga y que honran su trayectoria. En 1986 recibió el Premio de la Dipitación de Bizkia, y en 1988 el “Euskal Letren Merezimendu Saria” del Gobierno Vasco.
Murió en Bilbao en 1993.
Jon Kortazar