El Parque de Doña Casilda Iturrizar es un espacio público o parque urbano proyectado por el arquitecto Ricardo Bastida en 1907, año de su nombramiento como arquitecto de Construcciones Civiles del Ayuntamiento de Bilbao, con la colaboración del ingeniero agrónomo Juan Eguiraun. Es conocido popularmente como “el Parque de los patos”. Remata el segundo tramo de la Gran Vía y en su entorno se ubica el Museo de Bellas Artes de Bilbao. Coincidiendo con la última transformación urbana de la ciudad ha ampliado sus límites hasta unirse con el nuevo ámbito de Abandoibarra.

En el Proyecto de Ensanche de Bilbao de 1876 ya estaba prevista la construcción de un Jardín Público en la ladera existente entre la prolongación de la Gran Vía y la Ría.

Este parque urbano se fue ejecutando de manera simultánea con el desarrollo del Ensanche de Bilbao a lo largo de varios años y en él se complementan y conjuntan variados aspectos de jardinería, arquitectura y fontanería artística. Tiene influencia del arte de los jardines de Forestier y toma referencia del Parque de la Ciudadela de Barcelona. Al proyecto inicial se fueron incorporando posteriores reformas y modificaciones, como la pérgola de Pedro Ispizua y Pedro Guimón, el Museo de Bellas Artes y un aparcamiento subterráneo.

Se planteó urbanizar un trozo de naturaleza mediante paseos, alamedas y varios edificios,  incluyendo gran cascada central, paseo de carruajes, paseo de la alameda, lago, gruta, restaurante, jardín botánico e invernadero, aunque no llegó a realizarse todo lo previsto.

En el entorno del Museo de Bellas Artes y a lo largo del propio parque se ubican esculturas de varios artistas (“Escultura Juan Crisóstomo de Arriaga” de Francisco Durrio, “Il Risveglio” y “Eva” de Nemesio Mogrovejo, “Monumento a Valle” de Quintín de Torre, “Monumento de Ignacio Zuloaga” de Julio Beobide, “Lugar de encuentros IV” de Eduardo Chillida,  “A los hombres y mujeres que lucharon por la libertad y la democracia” de Nestor Basterretxea, “Five plates counter clockwise pentagon” de Richard Serra, “Fanal (garden of delights)” de Juan Luis Moraza, “Conexiones” de Miquel Navarro, “Monumento de Casilda Iturrizar” de Agustín Querol, “Monumento-fuente a Adolfo Guiard” de Félix Agüero y Estanislao Segurola, “Verdi” de Lourdes Umerez, “Relieves” de Enrique Barros, “Para mirar” de José Ramón Anda).

Hasta ocho décadas después no volverá a ejecutarse un nuevo parque en la ciudad, en este caso el Parque Europa en Txurdinaga, proyectado por el arquitecto Manuel Salinas.