Rafael Fontán Sáenz

Licenciado en arquitectura en 1925 por la Escuela de Madrid, emprendió su carrera como arquitecto junto a Manuel Ignacio Galíndez en su estudio, entre 1925 y 1932 desarrolló su etapa art-decó en Bilbao con los edificios Garay y Calvo, Asúa, Marques de Olaso y Santamaría. Los recursos decorativos eran plenamente decó. A partir de 1933 asumió el racionalismo ante la crisis del sector hasta 1948 con 48 propuestas racionalistas que supuso su aportación más importante. El historicismo de posguerra fue asumido tardíamente. En racionalismo empezó con dos proyectos en Bilbao casa de vecindad en la calle Iturribide ya Bilbao desaparecida y en Abascal que no realizó. Posteriormente llevó a cabo grupo de viviendas Olaso 11 bloques estilo racionalista en pleno Ensanche (no realizado) y el edificio de viviendas triple Arrate-Miñaur. La reforma completa del bloque Olmos.

 En 1938 realizó el edificio de viviendas Venero y Guijarro en el Ensanche entre Ercilla y Alameda Urquijo. También ese año realizó en Begoña el edificio de viviendas San Hilario. En 1940 realizó edificios viviendas Asúa y Uriarte de Bilbao. En 1941 viviendas Basañez, Zarandona y Amezua y edificios industriales Harino Panadera y Ayesta. En 1943 proyectó su proyecto más emblemático de su trayectoria, los ascensores de Begoña, uno de los grandes ejercicios del movimiento moderno, edificación con la estructura a la vista. Una torre de hormigón de 54 metros rematada con una galería mirador. Comunicaba Begoña con el casco viejo. Junto a la torre diseñó una pasarela de hormigón armado con el fin de salvar el desnivel de la ladera y facilitar el acceso a Begoña. Ese año diseñó el proyecto del grupo de viviendas viuda del Hierro en Bilbao y en 1944 el edificio Central de Oficinas entre Diputación y Arbieto. Además de los proyectos industriales la fábrica Aisa y el pabellón Garbisu (ambos desaparecidos) En 1946 lleva adelante dos proyectos industriales en Bilbao, los edificios Mutiozabal y Kaifer.

 Tras la guerra lleva a cabo varios proyectos con un historicismo hibrido, tres edificios de viviendas Serrano, Ondarra, Cortabarria y Zabaleta y Garbisu, además del noviciado de las Siervas de Jesús todos en Bilbao. En 1947 recibe el encargo de los edificios de viviendas Corte y las oficinas Basozabal en Bilbao. Ya en 1949 tiene que proyectar la reforma integral del Hotel Inglaterra pasando a ser el Hotel Almirante. Entre 1950 y 1953 lleva a cabo tres edificios en Bilbao las viviendas de Guturbay, Arenaza y Arregui, Zabala y Achutegui. Ya durante los años 50, en 1953 diseñó un gran proyecto que ocupaba toda una manzana del Ensanche entre Autonomía, San Mames y General Concha. Ya en 1954 el edificio de viviendas y oficinas Ochoa. En los años 60 llevó a cabo varios proyectos en arquitectura religiosa siendo su proyecto más brillante de la parroquia de Nuestra Señora de los Reyes y San Fernando 1962-1964 junto a Emiliano Amann. Destacaba por realizarse en unos sótanos. Otro proyecto a destacar fue el del Colegio de la Pureza entre la actual Sabino Arana y Rodríguez Arias.