El Teatro-Circo del Ensanche era un edificio teatral de
madera construido en 1895, en el mismo lugar en el que anteriormente se
levantaba un antiguo edificio de espectáculos cuyas referencias databan de
1883. Situado en la Gran Vía, en las inmediaciones de la plaza Elíptica, en el
ensanche de la ciudad del que toma su nombre, el Teatro-Circo había sido
proyectado por Atanasio de Anduiza. Estas edificaciones daban cuenta del
progresivo asentamiento de las barracas cinematográficas itinerantes que
recorrían la geografía del País Vasco con motivo de ferias y festejos
populares, junto con el creciente fenómeno de los espectáculos de masas. El
cine compartía así el gusto del público por los festejos populares
tradicionales y la fascinación por la tecnología y los espectáculos modernos. Fiel
al espíritu de la época, el edificio albergó primero actuaciones circenses, bailes,
funciones ecuestres y gimnásticas y posteriormente fue habilitado para la
realización de proyecciones cinematográficas.
El 24 de noviembre de 1912, el Teatro-Circo del Ensanche se convirtió en el centro informativo de la Villa debido a un luctuoso suceso. Una falsa alarma de incendio durante la proyección provoca el pánico entre el público que en aquel momento llenaba la sala, provocando una avalancha con el fatal desenlace de cerca de cincuenta muertos, la mayoría de ellos niños que asistían a la sesión vespertina. Los asistentes estaban sensibilizados por el clima de inquietud suscitado por diversos incendios e incidentes en las salas de espectáculos, como la ocurrida el 28 de mayo de ese mismo año en la localidad de Villareal (Castellón) donde murió mas de medio centenar de personas y cuyo precedente, con toda probabilidad, avivó el pánico entre el público.
La falta de medidas de seguridad y de evacuación, así como el desobedecimiento de las normas municipales y de aforo permitido causantes de la magnitud de la tragedia, tuvieron un gran impacto en la opinión pública y abrieron un encendido debate en la ciudad que terminó con su clausura por parte del gobernador civil y la expropiación del edificio, debido a la insolvencia de los propietarios para hacer frente a las sanciones.
El Teatro-Circo del Ensanche fue definitivamente clausurado y demolido en 1914.
Eneko Lorente